Hace un par de años pusimos a prueba unas bolsas con el sello «Ok Compost Home» y los resultados fueron decepcionantes. Después de 15 meses, no se compostaron.
Recientemente, un estudio ha llegado a nuestra misma conclusión. Se ha llevado a cabo en el Reino Unido con participación ciudadana (a nosotras nos encanta esto: ciudadanos participando en publicaciones científicas).
Bueno, pues han concluido que el 60% de los plásticos etiquetados compostables en composteras caseras no se desintegraron después de seis meses.
Muchos de los participantes en le estudio pusieron plásticos en estas composteras no deberían haber acabado ahí (es lo que tiene la ciencia ciudadana), como compostable industrialmente o biodegradables.
Esto no da una idea de lo confuso que es el etiquetado, incluso para quien tiene interés en hacerlo bien (si no te interesan estos temas no pones un compost en casa).
Han participado casi 10.000 ciudadanos, pero solo 1.648 hicieron el experimento con plástico con el sello “compost home”. Y de esos, solo 900 lo completaron.
Vamos a ver camaradas, si participamos hay que “leer bien las instrucciones” y también llegar al final ;)
Eso sí, las conclusiones del estudio se basan en los resultados de esos 900.
Al autor del estudio, Mark Miodowink, no le han gustado mucho las conclusiones: “la gente está intentando hacer lo correcto, me siento mal porque hayan salido estos resultados, pero el compostaje casero simplemente no funciona”.
A nosotras nos pasó lo mismo cuando hicimos nuestro experimento, nos quedamos con muy mal rollo. Nos hubiera encantado que se hubieran compostado y decir que es una solución. Aquí te dejamos el vídeo.
Además, Oceana justo acaba de publicar un documento sobre bioplásticos y ya el título lo dice todo: «Los bioplásticos siguen permaneciendo como plásticos. Falsas soluciones a la crisis por plástico en el océano«.
Dicen que estos plásticos pueden dar lugar a confusión, a que pensemos que son sostenibles, pero, si acaban en el medio ambiente, pueden hacer tanto daño como los convencionales.
En conclusión, el adjetivo que acompaña mejor a todas las bolsas y envases es el de «reutilizable». Esta es una palabra en desuso que esperamos que pronto empiece a utilizarse mucho más.
