Semana 8. Viviendo sin plástico

Se nos han acabado las vacaciones :(

Ya estamos de vuelta en Madrid.

Todo ha sido más fácil de lo que pensábamos en lo que a residuos se refiere. Hemos estado en La Antilla, Huelva, donde el agua del grifo está mala, y teníamos muchas dudas con el «¿y qué vamos a hacer con el agua?, ¿qué vamos a beber? y ¿cómo vamos a sobrevivir?» Después de investigar jarras tipo Brita y filtros de agua, sin que llegaran a convencernos, decidimos beber agua del grifo (después de todo, sólo eran quince días) y tenemos que decir que hemos bebido menos de lo que bebemos normalmente pero, ¡hemos sobrevivido!

Habíamos llevado comida (arroz, quinoa y pasta) con la idea comprar sólo unas pocas verduras para acompañarlos, pero al final hemos comido mucho fuera (que para eso estábamos de vacaciones) y no han hecho falta. Así que ha sido una semana más o menos fácil.

Recuento de plásticos

• 1 bote de crema hidratante. Esto es mío, Fer, y me duele hasta verlo. Nunca me ha gustado la cosmética industrial, ni los protectores solares. Lo compré la Semana 0, después de un día largo de piragüismo, con más viento y sol de lo esperado. Me achicharré, entré en la tienda más próxima y… fue lo más cómodo que encontré. Por lo menos ha servido para darme cuenta de lo que he avanzado en estas ocho semanas. Si ocurriese lo mismo hoy, lo último que se me ocurriría sería comprar un frasco de Nivea.
• 1 ventanita de pasta. Como hemos comentado alguna vez, para evitar comprar pasta envasada en plástico compramos pasta Barilla que es una marca italiana (además está muy rica) que envasa la pasta en cartón. Hasta ahí todo bien, sólo que en las cajitas de pasta integral ponen una ventanita de plástico mientras que en las «normales» no los llevan. Por ahora preferimos las ventanitas que la pasta no integral.

Y esto ha sido todo por esta semana, ahora con la vuelta a la normalidad, esperamos impacientes la semana en la que no tengamos ni un sólo plástico.